Kate Reese es una madre soltera que escapa de una relación de abuso para empezar desde cero en el pueblo de Mill Grove junto a su hijo de siete años. Pero Mill Grove no resulta ser ese lugar seguro que cree: Christopher desaparece en un bosque cercano, donde hace 50 años tuvo lugar otra desaparición similar de un niño que nunca fue resuelta. Seis días después de su desaparición, Christopher aparece, sin un rasguño, pero no es el mismo. Guarda un secreto: una voz en su interior le alerta de una tragedia que esta a punto de ocurrir y que sacudirá a todo el pueblo. La voz de este nuevo amigo también le dicta una misión: construir junto con sus amigos una casa en un árbol en el bosque, que le permitirá a este amigo escapar de la prisión donde lleva encerrado muchos años. Sin saberlo, Christopher, Kate y el resto de los habitantes de Mill Grove están destinados a jugar un papel en una batalla entre el bien y el mal que los llevará a luchar por sus propias vidas.
Soy un gran fan de Stephen Chbosky, leí en mi época de preparatoria su primer novela "The perks of being a wallflower" y recuerdo que fue uno de esos libros que más marcaron mi adolescencia, Stephen había creado una obra nostálgica que a través de cartas nos contaba la vida de Charlie un chico que iba aprendiendo acerca del amor, la amistad, el sexo y demás con el que sin duda todos nos identificamos en algún punto, y del que también se hizo una película muy conocida protagonizada por Logan Lerman, Emma Watson y Ezra Miller del que Chbosky se encargó de dirigirla.
20 años después de la primera publicación de The perks... Stephen nos trae otra novela completamente diferente, una novela de terror de más de 700 páginas y por supuesto que el hype de todo se puso hasta el cielo por este nuevo proyecto que nos prometía una novela terrorífica y déjenme decirles que lo confirmo, sin duda es uno de los libros que más ansiedad, incomodidad y terror me han dado.
Si pensamos que ya le teníamos calculado el agua a los frijoles con Stephen Chbosky y que conocíamos su escritura melancólica y suave pues estábamos muy equivocados, en este libro nos sorprende con una narrativa más oscura, más cardíaca en el que no se toca el corazón para poner en completa vulnerabilidad a los personajes de esta historia y darnos a nosotros como lectores escenas crudas, violentas y frías, que nos mantiene bastante tensos. Nuestro personaje principal es Christopher un niño de 8 años que se ha mudado con su madre a un nuevo pueblo huyendo de un padrastro abusador y con toda la intención de empezar de nuevo, su madre Kate Reese ha vivido siempre rodeada de violencia y es algo que no quiere para su hijo así que decidida a darle una mejor vida comienza a trabajar duro para darle lo mejor a Christopher a la vez que este se concentra en no darle muchos problemas a su mamá para no hacerla sufrir más de lo que ya ha pasado, pero le cuesta algo de trabajo ya que por más que intenta ser buen estudiante le cuesta mucho trabajo poder sacar buenas notas e incluso leer sin que se le muevan las letras de lugar. El día que Christopher desaparece su madre pone a todo el pueblo a buscar pero ni rastro de él, 6 días después una chica lo encuentra en la carretera como si nada hubiera pasado, físicamente esta bien pero algo dentro de él ha cambiado, Christopher no recuerda nada de esos días, pero ahora es muy inteligente, de ahí en adelante él se va dando cuenta de cosas bastante oscuras del pueblo y que el tendrá un papel muy importante para salvarlos a todos.
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