La familia de Kissen fue asesinada por los fanáticos de un dios del fuego. Ahora se gana la vida matando dioses y lo disfruta. Eso es hasta que encuentra un dios al que no puede matar: Skedi, un dios de mentiras piadosas, de alguna manera se ha vinculado a un joven noble, y ambos huyen de asesinos desconocidos.
Junto con un caballero desilusionado en una búsqueda secreta, deben viajar a la ciudad en ruinas de Blenraden, donde reside el último de los dioses salvajes, para pedir cada uno un favor.
Perseguidos por demonios y en medio de una creciente guerra civil, todos se enfrentarán a un ajuste de cuentas: algo se está pudriendo en el corazón de su mundo, y sólo ellos pueden ser los que puedan detenerlo.
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